por Verónica Nercesian
cita
Una distinción vernácula reconoce dos grandes grupos según la ubicación geográfica: los “pilcomayeños” o “los del Pilcomayo” y los “bermejeños” o “los del Bermejo” según habiten en el curso de los ríos Pilcomayo y Bermejo respectivamente. A su vez, dentro de cada uno de estos dos grupos los hablantes distinguen dos subgrupos lingüísticos: los phomlheley ‘arribeños’ (lit. ‘los que viven hacia arriba’, río arriba) y los chomlheley ‘abajeños’ (lit. ‘los que viven hacia abajo’, río abajo), según el curso de los ríos Pilcomayo y Bermejo (o Teuco). No obstante, las diferencias lingüísticas más evidentes, según los hablantes, se dan entre las variedades pilcomayeña y bermejeña.
Los dos grupos del Pilcomayo que identifican son: (a) los que se encuentran actualmente en el noreste de Salta en la rivera del río y zonas lindantes (algunos parajes son Santa Victoria Este y Santa María); en el noroeste de la provincia de Formosa, Departamento de Ramón Lista; y en algunos barrios de la localidad de Ingeniero G. N. Juárez sobre la ruta 81 y áreas lindantes en la misma provincia; y (b) los que habitan en la rivera del Pilcomayo río arriba en el departamento de Tarija, en Bolivia. Este último grupo es conocido como wenhayek entre los wichí. Los dos grupos lingüísticos del Bermejo son los que habitan actualmente río arriba en Embarcación, Misión Chaqueña, y aledaños, la zona de Rivadavia Banda sur en la provincia de Salta; y algunos barrios de la localidad de Ingeniero G. N. Juárez en la provincia de Formosa; también algunos hablantes de este grupo viven en Sauzalito, Chaco. El segundo grupo, los abajeños del Bermejo, se encuentra en la provincia de Formosa, en las cercanías de los pueblos sobre la Ruta Nacional 81 y en zonas aledañas al río Bermejo. Viven en algunos barrios de Ingeniero G. N. Juárez, y en la proximidad de las localidades de Laguna Yema, Pozo del Mortero, J. G. Bazán, Las Lomitas, Pozo del Tigre. En la provincia del Chaco, sobre la rivera del río Bermejo o Teuco en Sauzalito, en Nueva Pompeya, Pozo del Sapo y algunos barrios wichí en la ciudad de Castelli.
Para conocer con detalle cuáles son las diferencias entre las variedades mencionadas es necesario un estudio cuidadoso que complemente la investigación lingüística con conocimientos socio-históricos de la zona que involucra los dos países, Argentina y Bolivia. Este estudio se encuentra en curso (ver Proyectos en curso).
¿Qué es un dialecto?
El término “dialecto” ha tenido connotaciones peyorativas puesto que se la utilizado con el sentido de “desviación”, “variación menor, empobrecida, simplificada”. Incluso, ha sido adjudicado a las lenguas indígenas: los dialectos indígenas quitándole estatus de “lengua” a los idiomas que hablan los pueblos originarios sobre el preconcepto darwinista de que esos idiomas son “primitivos” respecto a los indoeuropeos que son “evolucionados”.
Ha sido exhaustivamente comprobado en la lingüística que no existe tal “evolución” lingüística, que todas las lenguas presentan complejidades en distintos aspectos, y que las lenguas, todas las lenguas, cambian con el paso del tiempo porque se usan. Todas las lenguas del mundo incorporan palabras, expresiones y sonidos de otras lenguas (en español encontrarán cantidad de palabras de origen indígena, arábico, latino, sajón, entre otros). Todas las lenguas del mundo incorporan palabras y términos nuevos, “innovaciones lingüísticas”, que crean los hablantes en distintos momentos y procesos sociales y pasan a formar parte de nuestro vocabulario cotidiano. Todas las lenguas cambian su morfología, su sintaxis y su fonología con el paso del tiempo generación tras generación. Los cambios en una lengua son signos de vitalidad, es decir, ocurren porque los hablantes la usan.
Como las lenguas cambian, cuando su extensión geográfica es muy amplia existe la tendencia a que surjan variaciones lingüísticas regionales que surgen a partir del uso local de los grupos más cercanos. Por ello se habla de “dialectos”, que no son más que “variedades lingüísticas” que presenta una lengua. En este sentido, una “lengua” es definida como todas la variedades (una o más de una) que comparten una variedad sobrepuesta que se asemeja en fonología y gramática a las variedades incluidas y que son inteligibles o están conectadas por una serie de variedades mutuamente inteligibles. “Dialecto” es un conjunto de una o más variedades de una lengua que comparten por lo menos un rasgo o combinación de rasgos que lo diferencian de otras variedades de la lengua y que puede ser tratado como una unidad ya sea por razones lingüísticas o no lingüísticas (Ferguson y Gumperz 1960). Se dice que un dialecto es un conjunto de variedades porque dentro pueden encontrarse diferencias que no están relacionadas a la zona geográfica que se usa sino a distinciones de clase o grupo social dentro de la misma región. Estas diferencias o variedades se llaman “sociolectos”.
Referencias
Ferguson, Ch. y J. J.Gumperz (1960) “Introduction”, en Ferguson, Ch. y J. J. Gumperz (eds.) Linguistic diversity in South Asia, IJAL 26, pp.1-18.
Palmer, John H. (2005). La buena voluntad wichí. Una espiritualidad indígena. Buenos Aires: Grupo de Trabajo Ruta 81.